El problema del concepto de “literatura finlandesa”

Esta publicación tratará la situación de autores inmigrantes en Finlandia y sus posibilidades de ejercer su profesión en nuestro país.

¿Sabían que en Finlandia hay autores residentes que escriben en otro idioma que finlandés, sueco o sami? Si tienen contacto con personas cuya lengua materna no es una de las previamente mencionadas, es muy posible que la respuesta sea afirmativa, pero al no ser el caso, este dato les puede resultar completamente nueva y, sobre todo, sorprendente. Ahora les presentaré unos datos al por qué. 

Katri Talaskivi, en su artículo Historiatietoisuutta, muutosvastarintaa vai resurssien varjelua? Suomalainen kirjallisuusinstituutio muunkielisten kirjailijoiden (sivu)valossacuenta que en el 2017 contactó con más de 70 autores residentes permanentemente o parcialmente en Finlandia con el propósito de entrevistar a autores cuya lengua materna no es el finlandés, sueco o sami. En primavera del 2018 había recibido 31 respuestas en 6 lenguas: inglés, español, árabe, ruso, alemán e incluso en finlandés, pero los autores anunciaron un total de 15 lenguas maternas o nativas. Según Talaskivi, la variedad podría ser aún mayor, ya que la mayoría de los autores cuya lengua materna no es una de las lenguas oficiales del país o el sami, no se encuentran en los registros finlandeses de becas, ni tienen una casa editorial finlandés ni son miembros de Kirjailijaliitto (una unión para autores finlandeses) ni de Finlands svenska författareförening (una asociación para autores suecoparlantes en Finlandia).  

No es que a los autores no les interese estas asociaciones, todo lo contario, sino que el concepto de literatura finlandesa es muy estrecho. Problemas son por ejemplo la noción del derecho de llamarse autor profesional, requisitos de tener publicaciones (y no en cualquier editorial), además del requisito que las publicaciones tienen que ser en finlandés o en sueco. Según Talaskivi, una gran parte de los autores que ejercen su profesión y desean publicar en su lengua materna llevan muchos años viviendo y trabajando en Finlandia, además de tener familia aquí y, a pesar de ser reconocidos en sus países de origen o internacionalmente, nadie los conoce en nuestro país.  Varios de ellos han traducido literatura finlandesa a su lengua natal y gracias a su labor autores finlandeses han llegado a ser conocidos por el público en sus países. En Finlandia, sin embargo, no los reconocen los editoriales, ni los conocen el público, ni siquiera los mismos autores finlandeses.  

Para ser autor profesional en Finlandia hay requisitos institucionales bastante definidos, y el problema es que esos requisitos solo son aplicables para finlandeses que escriben en finlandés o en sueco. Otros autores pueden tener dificultades en cuanto a mostrar su “profesionalidad” debido a que han publicado en internet o una casa editorial extranjera o que sus manuscritos están en un idioma que los editoriales finlandeses no tienen recursos para evaluar. La posibilidad de postular becas para poder, por ejemplo, trabajar o traducir sus obras para el público finlandés también es mínima, ya que es difícil para las fundaciones encontrar a una persona cualificada que pueda evaluar un manuscrito en la lengua en cuestión. Además, dice Talaskivi, puede que un autor hable y escriba cinco idiomas, pero no puede ni siquiera postular una beca por falta de conocimiento del finlandés, sueco o inglés, cuáles son los idiomas en que las fundaciones requieren las postulaciones.  

Los datos presentados no solo pesan en la vida profesional de autores que quieren vivir y trabajar en Finlandia, pero cuya lengua materna, natal o profesional no es el finlandés o el sueco, sino que son una lástima para la riqueza de literatura finlandesa y para el posible público. Para un lector o una lectora finlandés(a) sin duda sería interesante leer las obras de estos autores, ya que nuestro país y nuestra cultura inevitablemente han influido en su labor y nos contarían sus experiencias de vivir y trabajar aquí, mientras también aprendiéramos de sus culturas. 

TALASKIVI, Katri: “Historiatietoisuutta, muutosvastarintaa vai resurssien varjelua? Suomalainen kirjallisuusinstituutio muunkielisten kirjailijoiden (sivu)valossa”. Tuli & Savu, 94, 2017, 15-21. [disponible en: https://www.tulijasavu.net/osastot/nro-94/, consultado el 24.9.2019].

One thought on “El problema del concepto de “literatura finlandesa”

  1. Antti

    Muy buen comentario Mertsi!

    Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices. Sería una riqueza tener más obras de escritores cuya lengua no es el finés, sueco o inglés. Remarcas muy bien los puntos que obstaculizan o imposibilitan la carrera de un escritor “extranjero”. Todavía no hay maneras, o más bien recursos, para estos autores en llegar al mercado finlandés. El mayor problema evidentemente es el dinero. ¿Quién debería pagar los costes que requieren los cambios y desarrollos de los requisitos institucionales? ¿Cómo equilibrar las becas y otros beneficios que las uniones de los autores donarían, tomándose en cuenta la cantidad de todos los escritores de Finlandia? ¿Cuánto dinero tiene que ser invertido por el estado en el desarrollo de la literatura? ¿Qué es la literatura finlandesa? ¿Qué tan importante es la literatura finlandesa rica de otros idiomas para la comunidad finlandesa? Qué tan importante es la literatura en sí? Son preguntas con las que los políticos deberían ser más retadas.

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