Presentación: Los niños de la guerra

Las milicianas rojas en España y Finlandia

La Guerra Civil Española (1936-1939) y la Guerra Civil Finlandesa (1918) fueron muy importantes para los dos países y aunque las consecuencias de estas guerras fueron horribles y miles de finlandeses y de españoles murieron, también hay historias de heroísmo. En este trabajo voy a tratar las heroínas de la guerra, las milicianas. Tanto en la Guerra Civil Española como en la Finlandesa la mujer jugó un papel importante no solo en el hogar y el hospital sino también en la frente al lado del hombre.

En febrero de 1918 en Finlandia se crearon los grupos de Naiskaarti que equivalían a las milicianas de España. Correspondientemente en la España de 1936 se crearon organizaciones como la Agrupación de Mujeres Antifascistas que dependía del Partido Comunista, y Mujeres Libres, una organización anarquista.

 Aunque la mayoría de las milicianas finlandesas trabajaba en un hospital o como cocineras, también había mujeres que querían participar en la “verdadera” guerra y trabajar en el frente. Dos tercios de la milicianas finlandesas tenían trabajo en el campo de la industria antes de la guerra pero cuando estalló la guerra perdieron su trabajo. El motivo más importante para las mujeres a devenir milicianas era el desempleo y la falta de comida, tanto para las españolas como las finlandesas.

Así reflejaba el periódico Juventud el 25 de julio de 1936, los ánimos de las mujeres republicanas por luchar en el frente:

“no quieren ser solo auxiliares, quieren ser una fuerza de choque […]. Todas me dicen que quieren ir al frente, que no quieren que se las emplee solo para la Cruz Roja ni cosas semejantes, que quieren combatir”

La mayoría de las milicianas españolas y finlandesas eran jóvenes y solteras. Muchos de ellas tenían tan solo 15 años.  Hasta tres por ciento de los soldados finlandeses eran mujeres. En las batallas de la Guerra Civil Finlandesa cayeron 130 mujeres, 460 fueron fusiladas – aunque durante la guerra solo una mujer fue condenada a muerte – y en los campamentos para los prisioneros murieron 80 mujeres.

Un hombre finlandés que participaba en la guerra cuenta su memoria de las milicianas finlandesas y aplaude a las mujeres por haber aprendido muy rápidamente usar las armas y por no tener miedo de usarlas. Le parecía también que las mujeres fueron más interesadas en las ideologías socialistas detrás de la guerra que los hombres. También las milicianas españolas participaron en la guerra porque querían defender los derechos políticos y sociales que habían adquirido durante la Segunda República. En España las mujeres fueron discriminadas por los hombres que no creían en la capacidad de las mujeres de participar armadas en la guerra. Sin embargo, algunas dijeron que los hombres les trataban de una manera igualitaria. Una mujer conocida por su combatividad fue Rosaria La Dinamitera, a la que el poeta Miguel Hernández dedicó un poema:

Rosario, dinamitera,

sobre tu mano bonita

celaba la dinamita

sus atributos de fiera.

Nadie al mirarla creyera

que había en su corazón

una desesperación,

de cristales, de metralla

ansiosa de una batalla,

sedienta de una explosión.

Muchas milicianas finlandesas acabaron en los campamentos de prisioneros y fueron fusiladas allí. El promedio de edad de estas mujeres era solo 20 años. Lo que pasa tanto a las milicianas españolas como a las finlandesas es que muchos aplauden su valentía pero algunos dicen que se ha exagerado su colaboración en la guerra como milicianas y hasta se ha dicho en España que “en realidad la figura de la Miliciana tuvo más un carácter propagandístico que real”.

 

Fuentes:

Entrevista de Tuulikki Pekkalainen, escritora de Susinartut ja pikku immet, 21/11/2011: https://areena.yle.fi/1-1253883

Risto Lindstedt, Naiset punakaartissa 1918, 28/10/2011:

https://suomenkuvalehti.fi/jutut/kotimaa/naiset-punakaartissa-1918/

Hanna Lumme, Tutkimus: Hennalan vankileirillä tapettiin mielivaltaisesti yli 20 naista – nuorimmat 14-vuotiaita, 01/04/2016: https://yle.fi/uutiset/3-8775599

Pablo Alcántara, La mujer en la Guerra Civil Española: las milicianas 07/03/2017:

https://radiorecuperandomemoria.com/2017/03/07/la-mujer-en-la-guerra-civil-espanola-las-milicianas/

El papel de la mujer en la Guerra Civil Española, 23/05/2012:

https://arqueopatas.files.wordpress.com/2012/06/el-papel-de-la-mujer-en-la-guerra-civil-espac3b1ola1.pdf

Sami Suodenjoki, Naiskaartilaiset Tampereen taisteluissa: http://www15.uta.fi/koskivoimaa/valta/1918-40/naiskaar.htm

Álvaro López Franco, Las milicianas de la Guerra Civil Española, 10/09/2015:

https://descubrirlahistoria.es/2015/09/las-milicianas-de-la-guerra-civil-espanola/

Marjo Liukkonen, “Hennalan naismurhat 1918”, Lectio praecursoria 4.4.2016, 15/04/2016:

http://www.ennenjanyt.net/2016/04/marjo-liukkonen-hennalan-naismurhat-1918-lectio-praecursoria-4-4-2016/

 

 

Fotos:

Kansan arkisto: https://suomenkuvalehti.fi/jutut/kotimaa/susinartut-naiset-punakaartissa-1918-kuvakertomus/

https://radiorecuperandomemoria.com/2017/03/07/la-mujer-en-la-guerra-civil-espanola-las-milicianas/

Exilio republicano en México

En los años 1936-1939 miles de republicanos españoles huyeron de la Guerra Civil, varios se exiliaron a países como Francia, la URSS y México. Uno de estos exiliados fue el abuelo del escritor Jordi Soler. En la obra Rojos de Ultramar, Soler combina ficción y realidad para contar la historia de su abuelo y sus compañeros que huyeron de la guerra a México, el país que acogió más de 20.000 españoles durante los años 1939-42.

Desde el principio de la guerra, el gobierno mexicano encabezado por el presidente Lázaro Cárdenas había decidido ayudar a los republicanos españoles. Primeros españoles en llegar a México fueron los niños que huyeron de la guerra en 1937. Después llegaron los intelectuales (científicos, artistas, filósofos etc.) en 1938 y luego en 1939 al terminar la guerra el resto de los exiliados.

En 1938 en México se fundó  una casa para los intelectuales españoles, llamada Casa de España. La idea de esta “casa” era invitar a intelectuales  españoles a México para que tuviesen un lugar seguro donde “realizar sus ambiciones”. Primero invitaron a 12 profesores españoles y después del término de la guerra arribaron muchos más intelectuales españoles a México y a la Casa de España. Este fenómeno se llamaba inmigración intelectual.

Para ayudar a los republicanos españoles se creó dos organizaciones en Francia: Junta de Auxilio a los Republicanos Españoles (JARE) dirigida por el ex-ministro socialista Indalecio Prieto y Servicio de Evacuación de Refugiados Españoles (SERE) creado por el político Juan Negrín. Estas dos organizaciones ayudaron a los españoles adaptarse a México.

Además de la Casa de España se fundaron también los centros Cervantes en todas partes de México e Instituto Luis Vives (creado por SERE) en la Ciudad de México para los maestros y niños exiliados. Estos colegios tuvieron como modelo educativo los principios de la Segunda República. El narrador del Rojos de ultramar menciona a Luis Vives en la obra también: “Joan y yo éramos mexicanos y punto, habíamos nacido ahí, en la plantación de café, nunca fuimos ni al colegio Madrid, ni al Luis Vives,..”

La vida en su nuevo hogar no era necesariamente un camino de rosas para los españoles. Aunque se habían adaptado a la vida mexicana, habían construido sus casas allí  y se sintieron en casa, no todos los acogieron con mucha amabilidad como cuenta Arcadi en Rojos de Ultramar: “los 15 de septiembre, el día de la independencia, permanecíamos encerrados en casa porque los mexicanos de Galatea y sus alrededores tenían la costumbre de celebrar esa fiesta moliendo a palos a los españoles”.

Al fin Arcadi y sus compañeros empezaron sentirse en casa en Veracruz  y cuando Arcadi volvió a Cataluña se dio cuenta de que la vida no era igual que antes y la lengua había cambiado; no era esa lengua que ellos llevaban años hablando en México intentando conservar algo de su patria. Quizá esto era lo que pasó en muchos casos, sólo se puede imaginar cómo ha sido volver a la patria después de tantos años. Después de una vida. 

“La idea era que cuando muriera el dictador, dejarían México y regresarían a Cataluña. Pero el dictador tardó demasiado en morir y ya para entonces mi abuelo y sus socios habían pasado más años en México que en su país, y habían tenido hijos y nietos que los ataban a aquella tierra, a esa plantación que poco a poco se había ido convirtiendo en una suerte de aldea, en la que nací yo en 1963.” -Jordi Soler

 

Fuentes:

Jordi Soler: Rojos de ultramar, 2004

Los colegios del exilio en México, 2006:

http://www.residencia.csic.es/colegiosexilio/presentacion/inicio.htm

Jordi Soler: Catalanes en Veracruz, blog, 18/11/2011:

http://catalanesenveracruz.blogspot.fi/2011/11/ser-catalan-en-veracruz.html

Jordi Soler: El catalán de ultramar, 8/10/2014:

https://elpais.com/internacional/2014/10/08/actualidad/1412800058_154396.html

La casa de España:

http://www.jornada.unam.mx/2008/09/30/index.php?section=cultura&article=a04n1cul

José Andrés Rojo: Lázaro Cárdenas, el amigo de la República, 2/10/2005:

https://elpais.com/diario/2005/10/02/cultura/1128204001_850215.html

La voz de las funcionarias de la prisión

Antes de girar la llave, Mercedes le tendió la mano, y la extremeña le ofreció la mejilla. La funcionaria la besó. Giró la llave. Habló en voz baja: —Me alegro. Me alegro, de verdad, de que pueda marcharse de aquí.” En la obra de Dulce Chacón, La voz dormida, se trata poco de la vida de las funcionarias de la prisión donde las presas cuentan sus historias en el libro. En la parte en que se describe la liberación de Tomasa se muestra que también los funcionarios tenían sentimientos y no eran tan duros como yo creía. Por esto, quería averiguar cómo eran los trabajadores de la cárcel, ¿trabajaban allí por su propia voluntad o sólo porque no tenían opciones? ¿Estaban durmiendo sus voces también?

Las funcionarias de la cárcel de Ventas en La voz dormida son La Zapatones y Mercedes, y su superiora, la hermana María de los Serafínes, llamada como la Veneno de parte de las presas. Se les menciona a las funcionarias de vez en cuando y se sabe cómo actúan de punto de vista de las presas. La funcionaria que más revela su vida en el libro es Mercedes.

En el capítulo nueve de la primera parte se entera que el trabajo como funcionaria era el primer trabajo de Mercedes en la prisión y se nota que ella tiene miedo de perderlo. ”Mercedes quiere aprender a gritar. Grita, porque después del suceso del dedo del niño Dios recibió una dura amonestación de la hermana María de los Serafines. Le dijo que era muy blanda con las internas, y que debía aprender a ponerse en su sitio si no quería perder su puesto.

Se nota la humanidad de Mercedes cuando se presenta como voluntaria para trabajar en la enfermería y se revela un poco sus pensamientos. ”Ella supo que era incapaz de imponer su autoridad cuando preguntó de quién era la silla donde Hortensia estaba sentada. Las risas le dolieron como heridas abiertas, y se le saltaron las lágrimas. No tardarían en despedirla si continuaba comportándose así. Me parece que tanto las funcionarias como las presas tenían miedo en la cárcel aunque era un miedo diferente. No sé si las funcionarias tenían miedo de perder su trabajo porque les gustaba de verdad o si sólo necesitaban un trabajo.

En el libro se llega a saber que la funcionaria que las presas llaman La Zapatones es una gran admiradora de Franco. Se nota fácilmente que ella sí que está con los nacionalistas y en contra las ideologías republicanas. ”Es La Zapatones, y murmura en voz baja una letanía, –. Algunos creen que reza una oración. Pero no. Repite una y otra vez el último parte de guerra. El parte que su admirado Generalísimo escribió por primera vez de puño y letra. La guerra ha terminado. Y repite su desprecio, una y otra vez: Cautivo y desarmado el ejército rojo.” Además de esto, no se llega saber mucho más de La Zapatones.

No sé si Dulce Chacón había entrevistado a alguna funcionaria de las prisiones para su obra o si las historias de las funcionarias eran basadas en lo que ella había leído o simplemente en su imaginación. Sin embargo, según el libro de Fernando Hernández Holgado,que encontré en internet, las funcionarias de la sección femenina de la prisión de Ventas habían sido elegidas en un concurso público. Dice en su libro que para conseguir el trabajo, las mujeres tenían que superar un curso en la Escuela de Criminología. ”Parece ser que la mayoría eran simpatizantes o militantes de partidos republicanos de izquierda y socialistas.” Se añade también que en la prisión de Ventas en especial hubo varias separaciones de servicio y que los que perdieron su puesto de trabajo acabaron en un proceso judicial que podía llegar hasta años de encarcelamiento e incluso a muerte. En La voz dormida la funcionaria La Zapatones será despedida después de haber cometido un error de dejar a Elvira escapar con su hermano disfrazado como funcionario. Las presas de la galería número dos derecha verán marchar a La Zapatones mirando al frente. Será la última vez que la vean.

En conclusión, no descubrí la razón general que tenían los funcionarios para trabajar en la prisión pero creo que cada uno tenía sus motivos. En la época del franquismo seguro que la gente sufría de hambre y por eso cualquier trabajo bastara. Pero también creo que algunos funcionarios les gustaba su trabajo de verdad y sentían orgullo por su puesto.

Las fuentes:

Dulce Chacón: La voz dormida, 2002

Fernando Hernández Holgado: Mujeres encarceladas, 2003 https://books.google.es/books?id=ZE4_Z3IY3c8C&printsec=frontcover#v=onepage&q&f=false

¿Por qué España debería derogar la Ley de Amnistía?

Tras ser firmada el 15 de octubre de 1977 por el rey Juan Carlos I y entrar en vigor dos días después, la Ley de Amnistía ha causado mucha discusión. Esta ley amnistia a la gente practicamente de todos los delitos que cometieron durante la Guerra Civil y la dictadura de Franco. Me interesaba saber más sobre el efecto que ha tenido esta ley en las vidas de los españoles así que quería investigar un poco más el tema.

Durante la Guerra Civil y el franquismo se cometía muchos delitos graves. Según la Plataforma de Comisión de la Verdad (una comisión de asociaciones que están en contra de los crímenes del franquismo) aún en el año 2013 existía 130.000-150.000 desaparecidos – o sea, la mayoría personas que fueron ejecutados y cuyos restos están aún en las fosas comunes – y 30.000 bebés robados. Y estos no son los únicos crímenes amnistiados por la Ley de Amnistía, de hecho, ya en el primer artículo de la ley se dice lo siguiente: ”Quedan amnistiados todos los actos de intencionalidad política, cualquiera que fuese su resultado, tipificados como delitos y faltas realizados con anterioridad al día quince de diciembre de mil novecientos setenta y seis.

La Ley de Amnistía está en vigor aún ahora. Yo pienso que ocultar tales atrocidades que se cometía durante un período muy largo y oscuro en la historia de España – para no dejar los familiares de los muertos obtener justicia y tener los culpables responder de sus acciones – no debería ser admisible. Y no soy la única que piensa así, en efecto la ley ha recibido mucha desaprobación por parte de las organizaciones internacionales como la ONU y Human Rights Watch porque esta ley está considerablemente en contra a los derechos humanos.

Parece que no importa lo que hagan, todas las peticiones y querellas acaban rechazadas. A finales del año pasado, el partido Unidos Podemos presentó en la Comisión de Justicia la Proposición de No de Ley para no proteger los delitos de tortura, desapariciones forzadas, crímenes de genocidio o lesa humanidad cometidos durante el franquismo. Sin embargo, los tres partidos grandes, PP, PSOE y Ciudadanos rechazaron la proposición. Además de las organizaciones y partidos, hay individuos que han intentado actuar por la derogación de la ley. Un ejemplo es el juez Baltasar Garzón que investigó casos de detenciones ilegales y desaparecidos forzados cometidos entre 1936 y 1951 y acabó bajo investigación. Un otro intento fallado.

¿No sería más fácil para toda la comunidad española abrir las fosas comunes y obtener justicia? Como dijo el Caudillo mismo de ”salvar”todo el país ”cueste lo que cueste”. Claro que sí, va a salir caro exhumar todas la fosas comunes en España, pero ¿no debería ser así? ¿que los culpables paguen por sus acciones? Aunque llevarían años pudriéndose bajo la tierra, alguien siempre tiene que pagar por los delitos que ellos cometieron. Y si lo hubiesen pensado cuando mataban gente practicamente sólo por sus ideologías o por opiniones discrepantes, España no tendría este problema hoy en día.

Parece que esta ley es sólo una excusa para defender acciones repulsivas, para no tener que confrontar el pasado. Pero, ¿no sería la única manera de seguir adelante? Es normal que los familiares de los desaparecidos quieren saber qué ha pasado porque si nunca lo supieran, nunca podrían seguir sus vidas sin contemplar qué pasó a sus antecedentes. Ahora la gente que quiere descubrir dónde acabaron los restos de sus familiares perdidos en la guerra, tienen ganas de que la Ley de Amnistía sea derogada. Todo esto es una lucha pesada para España. Y no va a terminar hasta que el Estado cede.

En conclusión, opino que la Ley de Amnistía debería ser derogada para que las personas cuyos familiares desaparecieron durante la guerra y el franquismo obtuvieran paz y pudieran dejar todo el sufrimiento atrás. Y para que todo el país pudiera guardar los acontecimientos de esa época a su pasado, concentrarse en el futuro y seguir adelante.

Las fuentes:

https://www.boe.es/buscar/pdf/1977/BOE-A-1977-24937-consolidado.pdf

http://www.elperiodico.com/es/politica/20150723/onu-pide-derogar-ley-amnistia-espana-4380331

http://www.publico.es/politica/ley-amnistia-seguira-escudo-franquista.html

https://politica.elpais.com/politica/2015/07/23/actualidad/1437652718_820553.html

https://www.hrw.org/news/2010/03/19/spain-end-amnesty-franco-era-atrocities

https://www.es.amnesty.org/actua/acciones/espana-hacia-una-ley-de-punto-final/