Reseña crítica: Luiselli, Valeria (2016). Los niños perdidos. Madrid. Sexto piso.

A Valeria Luiselli la han titulado la nueva reveladora de las letras latinoamericanas, y no es un argumento de puro invento. Ella nació en Ciudad de México en 1983, y desde joven ha viajado por el mundo junto a su padre diplomático, lo cual ha despertado su interés hacia el bienestar global, al haberse expuesto a diferentes culturas y sociedades desde pequeña. Hasta ahora ha publicado tanto novelas como ensayos, y escribe columnas semanalmente para el periódico El País. Sus obras han alcanzado éxito internacional, tratando temas absorbidos de la vida real con sus injusticias y complejidades – los temas más dominantes son la inmigración, la transición y la reflexión.

Su obra Los niños perdidos es un ensayo publicado en 2016, y consiste en cuatro partes en las cuales Luiselli comparte experiencias de su trabajo como intérprete para los niños refugiados, detenidos en la frontera entre México y los Estados Unidos. A través de las cuarenta preguntas presentadas a los niños, conocemos algunas historias de ellos, incluyendo la historia desafortunada de un adolescente hondureño, Manu. A la vez Valeria tiene que enfrentar sus propios motivos para su llegada a los Estados Unidos, y preguntarse a sí misma que le va a pasar – ¿la van a considerar una ciudadana con los mismos derechos entre los demás, o no? –  Al final y al cabo, ella también ha querido dejar su país natal en la búsqueda de ciertas condiciones de vida – en su caso, las razones han sido principalmente laborales, mientras los niños desean no temer por sus vidas de forma constante-.

No es tan sencillo definir Los niños perdidos – es un ensayo autobiográfico, pero a la vez se podría considerar que hace la función de reportaje también. Se basa en la vida de Luiselli, y cómo ella observa la realidad por sus alrededores. Trata los temas típicos para su bibliografía personalizando los migrantes y presentando un alegato al discurso deshumanizante que demasiadas veces se centra solamente en las cifras. Luiselli relaciona los migrantes con la resiliencia, la cual es una característica poca vista al tratar el tema de la migración. Insiste la cantidad de coraje que demanda decidir dejar su país y arriesgarse solo para enfrentar algo todavía desconocido, y como a pesar de todo el miedo los niños han tomado esa decisión por la esperanza de una vida mejor en que cumplaran todos los derechos humanos.

A la vez, ofrece caracterizaciones sobre el procedimiento largo, duro y frustrante, elaborado por los Servicios Sociales de Inmigración y Ciudadanía de Estados Unidos, y como los niños tienen que saber manejarlo para que les concedan el asilo. Asimismo, muestra la influencia de Trumpismo y la xenofobia aceleradora en los Estados Unidos, la cual se representa hasta en el lenguaje y la formación de las preguntas. Luiselli ata diferentes tipos de texto de manera astuta, creando nuevas combinaciones de literatura.

La división del ensayo en cuatro partes es un buen ejemplo de la hibridad que practica la autora en sus obras. Cada parte (frontera, corte, casa, comunidad) representa el camino desde su país de origen a los Estados Unidos y la integración. Asimismo, funcionaban como palabras claves para los intérpretes para formar una idea coherente de la historia de cada niño. Ningún elemento en el libro existe por sí solo, sino tiene varios significados semánticos y representaciones a la vez. Precisamente en eso tiene su encanto.

En sus ensayos Luiselli consigue mostrar la importancia del lenguaje y la representación correcta de las preguntas que tratan temas duros. Hay que planear bien cómo preguntar a un niño de menos de 10 años sobre los horrores que ha tenido que enfrentar en su vida corta pero azarosa, y cómo construir una defensa convincente frente al juez al tratar la decisión de asilo de cada niño. En muchas ocasiones uno no tiene en cuenta el valor de las palabras, pero aquí se puede ver claramente que forma un aspecto que no se puede subestimar.

El talento de Luiselli de poder trasmitir tantos temas y sentimientos con solo cien y pico páginas ha sido notable – se puede sentir su frustración hacia el sistema injusto, pero a la vez no pierde la esperanza de poder hacer su parte para aliviar la situación de los que más sufren del sistema torcido. No solo trasmite sus propios sentimientos como la narradora, sino se puede sentir la mezcla de los diferentes sentimientos desde miedo hasta cansancio y resistencia. No intenta inventar un final feliz porque ella sinceramente admite que no sabe si lo va a haber. Uno se queda desesperado, pero a la vez es lo menos que podemos hacer después de absorber todo lo que nos ofrece el libro – quedarnos desesperados y llenos de rabia.

Luiselli enfatiza la importancia de la comunicación – en la última parte de la obra cuenta como un grupo de estudiantes a quienes daba clases de español, decidía formar una organización para ayudar a los niños y adolescentes migrantes integrarse en la sociedad estadounidense. La clave, según ella, es ampliar el conocimiento de las personas y hacerlas conscientes de las estructuras problemáticas, y que su colaboración verdaderamente puede llegar a tener efecto. Esto se puede ver en el trabajo de Luiselli – ella participa, observa, aprende, reporta y da inspiración, y nosotros podemos hacer lo mismo.

“Mientras tanto, mientras la historia no termine, lo único que se puede hacer es contarla y volverla a contar, a medida que se sigue desarrollando, bifurcando y complicando. Pero tiene que contarse, porque las historias difíciles necesitan ser narradas muchas veces, por muchas mentes, siempre con palabras diferentes y desde ángulos muy distintos.” (p. 88)

REFERENCIAS:

Luiselli, V. (2016) Los niños perdidos. Editorial sexto piso.

Martínez, A. (2016) Valeria Luiselli habla sobre su libro Los niños perdidos y la importancia de la resistencia en la era de Trump. The New York Times. [https://www.nytimes.com/es/2016/12/16/espanol/cultura/valeria-luiselli-ninos-perdidos.html, consultado en 13/12/2020]

Pando, F. (2020) Valeria Luiselli, escritora mexicana: ’Tenemos que abrirnos camino juntas’. Vogue. [https://www.vogue.mx/estilo-de-vida/articulo/valeria-luiselli-quien-es-la-escritora-mexicana, consultado en 13/12/2020]

Representación de los temas de memorización y ausencia en Conjunto Vacío de Verónica Gerber Bicacci

Verónica Gerber Bicacci es una autora mexicana, e hija de padres exilios argentinos. Nació en la Ciudad de México en 1981, cinco años después de sus padres llegar ahí desde Argentina. Principalmente trabaja de artista visual, pero asimismo ha publicado cinco obras literarias, una de ellas siendo Conjunto vacío (2015). (Bendeck, G. 2018.) El libro trata la vida sentimental de un personaje llamado Verónica, y observamos como se repiten ciertos temas en las relaciones de ella con su gente cercana – el abandono y ausencia. Las relaciones complejas que se presentan en la obra son las de Verónica con su madre, y con sus dos parejas, las cuales acaban de manera indeseada. Mi objetivo en este trabajo es analizar como se representan los temas de memorización y ausencia en la estructura externa e interna de la novela. Asimismo, quiero pensar en los motivos de la autora para construir la novela con las estructuras tal y como son.

La novela se narra desde la perspectiva de Verónica, y nos cuenta sobre sus relaciones con su madre, y sus dos novios, Tordo y Alonso, a lo largo de un periodo indeterminado. La madre de Verónica parece estar desaparecida, difuminada, y así ha abandonado a Verónica y su hermano, pero aún así existe para ellos – está presente y ausente a la vez. Mi interpretación personal es que la madre quizá tenga problemas con su salud mental, los cuales no la permiten tan buena madre y se aleja de la realidad. La relación con Tordo falla al Tordo enamorarse de otra mujer, y con Alonso a su vez parecen ir alejándose por él ser inalcanzable e indispuesto a mantener el contacto.

La novela está estructurada en 135 fragmentos, otros siendo más cortos que ortos. Estos fragmentos incluyen, por ejemplo, dibujos sencillos, diagramas de Venn, mensajes escritos al revés, cartas… – los recursos son variables y versátiles. La estructuración de las memorias presentadas en la obra no es lineal, sino a veces hasta confunde a los lectores saltando de una memoria y relación a la otra.  Interpreto esta estructura fracturada como una referencia a la función típica de memoria: los seres humanos tienden a memorizar cosas en formato de momentos limitados y pasajeros. Al recordar de ciertas cosas del pasado, se activan las memorias de otras experiencias parecidas, y en total crean un tipo de bucle de cierto sentimiento apoyados por dichas experiencias.

La novela narra los destinos indeseados de cada relación, pero cada relación, sobre todo la de Verónica y su madre, deja muchas preguntas abiertas: ¿qué es lo que precisamente sucedió a la madre? ¿Se marchó, se difundió, abandonó a sus hijos de manera consciente o no? ¿Cómo es su ausencia? Como mencionado antes, los fragmentos de la obra son a veces cortos, e incluso hay páginas que contienen solo un dibujo o un diagrama sin más – se podría decir que hay una abundancia de ausencia del texto en la obra. Aparte de representar el tema de ausencia así, considero que la falta de palabras refleja también la imposibilidad de expresar ciertas memorias de manera conclusiva y coherente.

Estas observaciones llevan a pensar en el símbolo de conjunto vacío, cual aparece en la tapa de la novela. Puede contener varios significados a la vez, lo cual sería muy probable en el caso de esta novela, siendo tan diversa. Sin embargo, si lo observamos desde el punto de vista de este análisis, podríamos concluir que representa la incapacidad de expresar verbalmente y explicarse a sí misma ciertas memorias de la vida – la raya es la mente, y el conjunto la memoria, pues la raya salta las líneas de la memoria no consiguiendo quedarse en que verdaderamente consiste cada memoria.

Conjunto vacío definitivamente es una obra pluridimensional, en que juegan un papel importante la narración, la parte visual pero también lo que queda sin narrar. Los temas llegan tanto a la estructura externa como interna. Es casi imposible interpretar todos los aspectos de la obra a la vez – siempre queda algo ausente, lo cual también forma parte del encanto de la novela de la autora visual, ya que demanda ser releída varias veces.

Bibliografía

Gerber Bicecci, Verónica. 2015. Conjunto Vacío.

Bendeck, G. 21.02.2018. In the Absence of Words: An Interview with Verónica Gerber Bicecci. Words Without Borders. https://www.wordswithoutborders.org/dispatches/article/in-the-absence-of-words-an-interview-with-veronica-gerber-bicecci

La desaparición de Mamá(M) como representación de enfermedad mental en Conjunto vacío

En este trabajo trataré el tema de la desaparición del personaje Mamá(M) en la obra Conjunto vacío de Verónica Gerber Bicecci e intentaré responder a la pregunta de por qué la narradora describe la desaparición de esta manera. No se explica explícitamente lo que le ha pasado a la madre de la protagonista Verónica, pero la narradora sí proporciona varias pistas sobre el destino de ella.

La desaparición de Mamá(M) es un acontecimiento muy importante en la vida de la protagonista-narradora, su hija Verónica. Se implica que la madre desaparece cuando ella tiene 14 años, pero nunca se explica lo que le pasó exactamente. No obstante, queda claro que algo raro está pasando en el apartamiento de la madre (o “búnker”, como lo denominan la protagonista y su hermano); las cosas se mueven sin que nadie las mueva y se escuchan voces, aunque nadie debería estar allí:

En el búnker las cosas se cambian de lugar. O al menos parece. Estaba segura de que había dejado un libro sobre el escritorio y no en el librero, o los zapatos en la sala y no en mi recámara. Podría jurar que compré yogur y ya no había. (129)

La primera noche sola volví a escucharla hablando en la sala. La luz de la computadora ya no iluminaba el camino así que me guie con las paredes. Nadie. Regresé a cama. (29)

La narradora da una explicación casi sobrenatural ya que implica que las cosas extrañas que acontecen en el búnker se explican por el hecho de que el búnker “había logrado producir algún tipo de singularidad espaciotemporal”. (18) También da la impresión de que Mamá(M) simplemente ha abandonado sus hijos y se ha ido a algún sitio desconocido. Sin embargo, no creo que esto sea el caso. Tal como afirma Deffis, para entender la obra es imprescindible que el lector intente descifrar lo que se dice e ilustra en ella (2020, 26). Aunque la narradora no da una respuesta explícita al misterio de la madre, sí que da pistas continuas al lector. Yo pienso que la respuesta está en el búnker –la madre sigue allí físicamente, pero mentalmente está en otro lugar–.

Ya desde el inicio de la obra queda bastante claro que la madre tiene algún tipo de paranoia, quizás síntomas de esquizofrenia. Por eso ha montado el búnker en primer lugar: “Un sistema perfectamente cerrado que Mamá(M) construyó antes de desdibujarse […]. (18) La narradora también nos hace saber que la madre no se siente segura, siente que algo o alguien le está amenazando a ella y a sus hijos:

Era temprano en la mañana, estábamos saliendo a la escuela y mamá dijo que no. Dijo que era mejor quedarse en casa. Dijo que no prendiéramos la tele, que no prendiéramos nada. Dijo que había que guardar silencio. (16)

Mamá(M) empieza a hablar de los árboles del parque. Dice que en las cortezas se ven rostros. Que todos esos rostros miran hacia la casa. Que todos esos rostros nos miran.
Nos ordena dejar de regar las plantas. (16)

La presencia de síntomas mentales está muy fuerte justamente antes de la desaparición de la madre. Sin embargo, la narradora nunca dice que la madre se salió del búnker –dice que “empieza a difuminarse” (15) y que “al final ya no podíamos verla” (16)–. Según mi interpretación, Mamá(M) nunca se fue a ningún sitio, sino no solamente se cerró en el búnker, pero también en su mundo interno donde está a salvo de los que le persiguen. Sabemos que la madre se ha exiliado a México para huir de la dictadura argentina, lo que muy probablemente también es la causa de sus síntomas.

Para responder a la cuestión de por qué se describe la enfermedad mental de la madre de este modo, necesitamos tener en cuenta varios puntos. El primer es que Mamá(M) “se desapareció” cuando la protagonista tenía sólo 14 años –o sea, era una niña–. Una enfermedad mental de un pariente cercano siempre es un acontecimiento traumático que es difícil de entender, especialmente para una niña de 14 años.

A lo largo de la obra también queda claro que a veces la narradora no sabe o no quiere expresar sus sentimientos mediante palabras, así que acaba usando diagramas o dibujos: de allí podemos deducir que tiene una mente bastante analítica, ve el mundo vía imágenes, entiende su vida mediante diagramas. Por lo tanto, interpreto la “desaparición” de la madre como una metáfora de intentar explicar y entender que ella ya no está mentalmente en el lugar donde debería estar, que ya es imposible establecer contacto con ella. La madre ha desaparecido del universo de Verónica, ha escapado a un mundo que no está en ningún sitio que conozca Verónica o su hermano:

“Les hicimos creer que Mamá(M) estaba ahí –aunque ni siquiera nosotros podíamos verla–. Había cruzado una frontera que ni mi Hermano(H) ni Yo(Y) sabíamos cómo cruzar.” (19)

Desde mi punto de vista, los diagramas que presenta la narradora-protagonista dan la última prueba de que la madre está en un mundo aparte. El diagrama siguiente muestra perfectamente que la madre ha construido su propio mundo que no está en México ni en Argentina, sino “Mamá(M) encontró la forma de quedarse justo en medio, en un lugar donde nadie puede encontrarla.” (35) P1 representa México, P2 Argentina.

Figura 1 (p.35)

En este trabajo he argumentado que la desaparición de la madre de Verónica, que se narra de una manera poco explícita en la obra, funciona como una metáfora de una enfermedad mental. La protagonista intenta procesar un acontecimiento muy traumático para ella de la manera que le resulta la más lógica y que reflecta el punto de vista de una niña. Sin embargo, la manera de describir la enfermedad de la madre también reflecta una imagen del mundo muy analítica y visual, que encaja perfectamente con la tendencia de la narradora de expresar pensamientos mediante diagramas y dibujos en vez de palabras.

Bibliografía:

DEFFIS, Emilia (2020): “‘La necrópolis interior’ en Conjunto vacío de Verónica Gerber Bisecci”. Anclajes XXIV (2), pp. 17-32.

GERBER BICECCI, Verónica (2017): Conjunto vacío. La Rioja: Pepitas.

-La parte de los críticos- en 2666 de Roberto Bolaño bajo el aspecto de la migración

Roberto Bolaño quién fue uno de los autores hispanohablantes contemporáneos más celebrados de las últimas décadas, muestra, a pesar de su lamentablemente corta vida, un currículum largo y transcultural, lo que se presenta también en sus trabajos prosaicos. Después de ser nacido y haber crecido en Chile, pasó su juventud en México. Bolaño vuelve a su país de orígen con 20 años para participar en la visión socialista en el país, liderada por Salvador Allende. Poco después, el golpe de estado destruye las esperanzas de una generación y Bolaño se encuentra en captividad para aperentemente ocho días. Saliendo de la cárcel, con la ayuda de amigos, logra huir el país, regresa a México y luego emigra del continente americano para vivir en España, dónde nacen sus hijos y pasa la gran parte del resto de su vida, que termina en Barcelona en el año 2003, debido a una cirrosis, que resultaba de una infección con hepatitis en su juventud que no había sido tratada adecuadamente.

Su vivencia personal de migración ciertamente se encuentra entre las páginas de su obra completa, pero en este ensayo quiero dibujar algunas de las diferentes formas de migración que se encuentran en su obra póstuma 2666. Esta ficción, alabada por los críticos, se compone de 5 partes que contienen varias interreferencias. Lamentablemente, un concepto general no podía ser evidenciado, porque el autor mismo, en sus últimas semanas de enfermedad, que pasó escribiendo en la cama del hospital, aparentemente articulaba el deseo de que las partes fueran publicadas como cinco obras distintas, lo que ha sido denotado de ser más lucrativo para sus amados. Pero al final no podemos tener certitud y puede ayudar ver 2666 como una obra coherente.

Decidí examinar la primera parte <<parte de los críticos>>, en la que 4 críticos de literatura, más específicamente, seguidores del autor alemán ficticio Benno von Archimboldi, van de búsqueda por el autor, quién queda desconocido al público. Esta búsqueda les hace correr el continente europeo y les lleva finalmente hasta México, a una ciudad ficticia Santa Teresa, que imita la ciudad fronteriza de Juárez. Allí, una sombra oscura se señala desde la cuarta parte de 2666, <<la parte de los crímenes>>. En ella, una serie de feminicidios terroriza la ciudad y el narrador usa una gran parte de las 400 páginas para contar lo que se sabe sobre las asesinadas y describir detalladamente los cuerpos muertos.

Un aspecto interesante en la <<parte de los críticos>> acerca de la migración se encuentra en el cosmopolitismo europeo, que los académicos persiguen y que los une. Sus países de orígen son Inglaterra, Italia, España y Francia. Con el alemán y el inglés tienen dos lenguas en común y cuando su amistad se desarrolla tras los años y el amor les pega juntos aún más fuerte, sus viajes frecuentes les llevan de una parte de Europa a la próxima. Pero a pesar de estar en regiones desconocidas, nunca se encuentran en una crísis. Sin embargo, la novela nos deja con la impresión, que para estas personas, los países del oeste son hogar para todos los descendientes del oeste mismo. Bolaño no incluye otros lenguajes en esta parte, dibujando un imagen homogeneo de la comunicación intraeuropea. De esta manera, la percepción de una unión europea que es verdaderamente unida en la mente se nos presenta.

Esta idea me persiguió durante la lectura completa de la novela. La idea del otro tiene pocos lugares para interferir con los académicos, pero una situación es fundamental para entender la separación de europeos cosmopolitos en general y personas provenientes de la periferia, nombrados migrantes. En Londres, Pelletier, Espinoza y Norton, tres de los cuatro académicos insultan a un taxista paquistaní, reiendose de su mala educación. El paquistaní entiende que ellos se están encumbrando sobre él y responde con un insulto sexista y vulgar contra Norton.

<<Y cuando Norton le dijo que se había perdido y le indicó qué calles debía tomar para enderezar el rumbo el taxista permaneció, otra vez, en silencio, sin más murmullos en su lengua incomprensible, para luego reconocer que, en efecto, el laberinto que era Londres había conseguido desorientarlo.

Algo que llevó a Espinoza a decir que el taxista, sin proponérselo que era Londres había citado a Borges, que una vez comparó Londres con un laberinto. A lo que Norton replicó que mucho antes que Borges, Dickens y Stevenson se habían referido a Londres utilizando ese tropo. Cosa que, por lo visto, el taxista no estaba dispuesto a tolerar, pues acto seguido dijoque él, un paquistaní, podía no conocer a ese mentado Borges, y que también podía no haber leído nunca a esos mentados señores Dickens y Stevenson, y que incluso tal vez aún no conocía lo suficientemente bien Londres y sus calles y que por esa razón la había comparado con un laberinto, pero que, por contra, sabía muy bien lo que era la decencia y la dignidad y que, por lo que había escuchado, la mujer aquí presente, es decir Norton, carecía de decencia y de dignidad, y que en su país eso tenía un nombre, el mismo que se le daba en Londres, qué casualidad, y que ese nombre era el de puta…>>

Los dos hombres Pelletier y Espinoza entonces salen del carro y lo pegan hasta el punto de considerar que le hubiesen matado. Huyen y no enfrentan las consequencias. Este acto de violencia nos deja despatarrados, porque no se muestra por nada en el contacto social académico que suelen hacer los críticos hasta entonces.

Cuando finalmente siguen una huella del escritor alemán que les lleva a México y al centro de una crísis de feminicidios, se desvela el carácter de los académicos. Se sienten incómodos en el lugar de la perifería, donde además, la crísis del neoliberalismo en el continente americano se muestra tan gráfica con los asesinos de cientos de mujeres que están mayormente de paso migratorio en el camino hacia los Estados Unidos. Sobre todo, cómo el francés y el español actuan allí es bastante interesante. El francés Pelletier se queda mayormente en el hotel y lee libros, mientras el español Espinoza recorre los bares y explota una vendedora joven sexualmente. Se puede interpretar en estos dos carácteres la colonización intelectual por las ideas franceses y la colonización literal del continente americano por España.

 

Estos cuatro académicos representan una unión europea que es educada, cosmopólita, plurilingual, violenta, represor y colonialista. De toda manera, interpretando como sea, estos europeos se encuentran enfrentados con algo que no conocen y que no les da un hogar intelectual para sentirse cómodos, lo que se muestra en sus actos. Bolaño entonces, indicando, que la percepción cosmopolita de los académicos incluye una hegemonia intelectual y que existe un otro que no saben superar, llama la atención en las rutas migratorias y la dirección que ellas tienen y ataca de manera crítica el margen de la intelectualidad del oeste.

 

 


Bolaño, Roberto; Penguin Random House Grupo Editorial; Barcelona 2017 (herederos de Roberto Bolaño 2004)